Miel de lavanda, de Eucalipto, Azahar, Encina, Alta montaña... Diferentes precios según envase.
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Endulzante natural: La miel es conocida por su dulzura natural, que la hace perfecta para usar en una amplia gama de recetas, desde postres hasta aderezos para ensaladas.
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Nutritiva: Aunque principalmente es azúcar, la miel también contiene pequeñas cantidades de vitaminas, minerales y antioxidantes. Estos pueden variar dependiendo del tipo de floración de las abejas que la producen.
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Propiedades antibacterianas: La miel tiene propiedades antibacterianas naturales debido a su bajo contenido de agua y su acidez. Esto la hace útil para el tratamiento de heridas y quemaduras menores.
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Antioxidantes: La miel contiene antioxidantes que pueden ayudar a combatir el daño causado por los radicales libres en el cuerpo, lo que puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades crónicas.
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Remedio para la tos y la garganta: La miel se ha utilizado tradicionalmente como remedio casero para aliviar la tos y calmar la garganta irritada. Se cree que sus propiedades viscosas y su capacidad para formar una capa protectora en la garganta son útiles en este sentido.
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Digestiva: Algunas personas encuentran que consumir miel puede ayudar a aliviar problemas digestivos menores, como el estreñimiento o la acidez estomacal.
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Energética: Debido a su contenido de azúcar natural, la miel puede proporcionar un impulso rápido de energía. Es una opción popular para deportistas y personas activas.
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Promueve la salud de la piel: La miel se utiliza en productos para el cuidado de la piel debido a sus propiedades hidratantes y antioxidantes. Puede ayudar a calmar la piel irritada y a reducir la inflamación.
Recuerda que aunque la miel ofrece muchos beneficios, debe consumirse con moderación, ya que sigue siendo alta en calorías y azúcar.